Cómo jugar al Hearthstone
Hearthstone es un juego entre dos en el que se usan cubiertas previamente construidas. El objetivo del juego es matar al héroe de tu oponente.
Cada héroe tiene 30 puntos de vida y el que se quede con 0, pierde. El jugador que empieza el juego, lo hace con 3 cartas. En este punto, tendrá la posibilidad de recuperar cierto número de estas cartas si no le gusta la mano que le ha llegado. El siguiente paso es empatar la carta que le hayan dado en primer lugar y que se llama “mana crystal”. Esta es la base de todo el sistema económico del Hearthstone: los jugadores ganan una en cada turno y pueden gastar la suma de las cartas que necesiten para jugar. Estas cartas tienen diferentes atributos: salud, ataque y “mana cost”.
La primera representa cuánto daño puede sufrir una carta. La segunda, cuánto daño de puntos puedes descargar y el tercer atributo determina cuánto costará la suma de las cartas. Para batir a su oponente, tienes que destruir sus defensas usando monstruos y atacarlo directamente hasta que sus puntos se queden en 0.
Hearthstone es un juego complicado y necesitarás cierta experiencia para controlarlo bien. Tiene muchas posibilidades de pasarlo bien creando nuevas combinaciones que sean útiles contra sus enemigos. Se trata de un juego que explora nuevas estrategias, encontrando sus fortalezas y debilidades y aprovechando ese conocimiento para convertirse en una fuerza a tener en cuenta.